Wilma Mancuello González, MIC
Universidad Católica Nuestra Señora de la Asunción (Paraguay)
https://orcid.org/0000-0001-6164-8829
Resumen: El texto de Pr 31,1-9LXX diverge de Pr 31,1-9TM. El problema fundamental es saber si las lectiones discordantes con el TM se deben a una Vorlage diferente o si se puede reconducir al mismo o cercano texto hebreo en virtud de las técnicas de traducción. Con el propósito de descifrar los motivos de tales disimilitudes, este estudio aplica el método de Staffan Olofsson y asume el principio de que a la crítica filológica hay que añadir el acervo teológico del traductor. El análisis demuestra que las técnicas de traducción literal y libre se cumplen en Pr 31,1-9LXX y, sugiere 3 Re 3,4-28 como trasfondo de los cambios semánticos presentes en la colección.
Palabras clave: Proverbios. Septuaginta. Texto Masorético. Traducción literal. Traducción libre. Divergencias. Dios. Rey. Paralelismos.
Abstract: The text of LXX Pr 31,1-9 diverges from MT Pr 31,1-9. The fundamental problem is to know if the discordant lessons with the MT are due to a different Vorlage or if it can be brought back to the same or close Hebrew text by virtue of translation techniques. With the purpose of deciphering the reasons for such dissimilarities, this study applies Staffan Olofsson’s method and assumes the criteria that the theological heritage of the translator must be added to philological criticism. The analysis shows that the literal and free translation techniques are fulfilled in LXX Pr 31,1-9 and, it suggests 3 Kings 3,4-28 as a background for the semantic changes present in the collection.
Keywords: Proverbs. Septuagint. Masoretic Text. Free Translation. Literal Translation. Divergences. God. King. Parallelisms.
Un cotejo entre las versiones hebrea (Texto Masorético)1, aramea (Targum)2, griega (Septuaginta)3, siríaca (Peshitta)4 y latina (Vulgata)5 del texto de Pr 31,1-96 plantea una amplia gama de posibilidades exegéticas y cuestiones de crítica textual7 difíciles de resolver. La S es notoria por su amalgama de lecturas, pues en determinados casos coincide con el TM en contra de la LXX (vv. 1.2.3.4) o viceversa (vv. 1.6.8). El Tg parece basarse en un texto cercano al TM y en algunos casos concuerda con la S (vv. 4.8). La Vg reproduce, casi literalmente, el TM, excepto, contados casos (vv. 2.4)8.
La divergencia más evidente, llamativa e importante, sin embargo, es la existente entre la versión hebrea y la griega9. El problema fundamental es saber si las lectiones discordantes con el TM se deben a una Vorlage diferente o si se puede reconducir al mismo o cercano texto hebreo en virtud de las técnicas de traducción. A propósito del uso de la LXX en la crítica textual de algunos libros de la Biblia Hebrea, Fernández Marcos propone:
Antes de recurrir a la hipótesis de una Vorlage hebrea diferente, se deben eliminar otras posibles explicaciones más plausibles, entre otros, a saber, nuevas ediciones críticas de la LXX y nuestro conocimiento sobre las técnicas de traducción de los diferentes libros10.
Con relación a la primera posibilidad, no está en nuestras manos resolverla. En cambio, las llamadas técnicas de traducción empleadas en la Septuaginta son objeto de estudios. Se insiste, ante todo, sobre aquella empleada en cada libro en particular, separado del resto, para poder identificar las características propias de la obra en su totalidad. Y en este contexto, se ubica la posibilidad de hablar, con un cierto grado de probabilidad, que tales o cuales variantes específicas puedan provenir del traductor y de su labor o bien corresponden al estilo general del libro y, si fuera el caso, de una Vorlage diferente11.
Tenemos a nuestra disposición, actualmente, notables contribuciones sobre la materia. Bien es verdad que no hay criterios completamente consensuados para la distinción entre traducción literal y libre aplicada al estudio de la Biblia Griega12, pero la mayoría de los investigadores sostienen que la traducción más libre frente a su referente hebreo es el libro de los Proverbios13, aunque no haya tampoco acuerdo sobre el modo de definir la categoría libre14, pese a ser el adjetivo empleado, desde los primeros estudios críticos, para hablar de la versión griega del libro de los Proverbios15.
Por nuestra parte, entendemos con Barr que el traductor combinó las llamadas traducción literal y traducción libre16. Ambas técnicas se cumplen en el texto de Pr 31,1-9LXX y el análisis posterior se encargará de demostrarlo. Asumimos los criterios ofrecidos por Olofsson17 que desarrolla trabajos precedentes de Barr18 y de Tov19. En cuanto a traducción libre consideramos que “el traductor de Proverbios LXX en muchos casos hizo elecciones lingüísticas específicas sobre la base de consideraciones religiosas”20 provenientes de su cultura bíblica además del empeño de verter los versos en un “verdadero griego”21. En otras palabras, a la crítica filológica hay que añadir el acervo teológico-bíblico de los traductores22, tratando la perícopa en el contexto cada vez más pequeño sin perder de vista el libro como un todo23. A nuestro parecer, en el caso del libro de los Proverbios, la forma del TM conserva el texto más antiguo y está muy bien articulado y estructurado24. Por eso, el cotejo se efectuará considerándolo como si fuera su texto de referencia y teniendo en cuenta los criterios evocados en precedencia. Nuestro texto25 será el de la edición de Alfred Rahlfs.
Una vez presentada nuestra traducción castellana del texto griego con algunas notas, procedemos al análisis comparativo de la perícopa para demostrar que las diferencias entre ambas tradiciones manuscritas a nivel sintáctico, semántico, estilístico y de contenido pueden ser adjudicadas a la labor deliberada del traductor/intérprete de la colección26 bajo el posible influjo de 1 Re 3,4-2827 (3 Re 3,4-28)28. Y finalmente recogemos los resultados en una conclusión a modo de síntesis.
1 Hoi emoì lógoi eírēntai hypò Theoû, basiléōs jrēmatismós, hòn epaìdeusen hē mḗtēr autoû. |
Mis palabras han sido dichas por Dios, un oráculo del rey, que su madre le enseñó. |
2 Tí téknon tērḗseis? tí? rhḗseis Theoû Prōtogenés, soì légō, hyié tí teknon emês koilías? tí téknon emôn eujôn? |
¿Qué guardarás hijo? ¿qué? Primogénito, a ti te hablo, hijo! ¿qué, hijo de mi vientre? ¿qué, hijo de mis votos? |
3 mḕ dôi gynaixì sòn ploûton kaì tòn sòn noûn kaì bíon eis hysteroboulían. |
Nos des tu riqueza a mujeres ni tu inteligencia, ni tu vida para luego arrepentirte. |
4 metà boulês pánta poíei, metà boulês oinopótei hoi dynástai thymṓdeis eisín, oînon dè mḕ pinétōsan, |
Haz todo con reflexión, bebe con reflexión, los príncipes son iracundos en cambio, no beban vino. |
5 hína mḕ pióntes epiláthōntai tês sofías kaì orthà kpînai ou mḕ dýnōntai toùs astheneîs. |
No sea que bebiendo olviden la sabiduría y no puedan juzgar rectamente a los débiles. |
6 dídote méthēn toîs en lýpais kaì oînon pínein toîs en odýnais. |
Dad embriaguez a los tristes y de beber vino a los apenados |
7 hína epiláthōntai tês penías kaì tôn pónōn mḕmnēsthôsin éti. |
para que olviden la pobreza y las penas no sean más recordadas |
8 ánoige sòn stóma lógōi Theoû kaì kpîne pántas hygiôs |
Abre tu boca a la Palabra de Dios y juzga a todos sanamente. |
9 ánoige sòn stóma kaì krîne dikaíōs, diákrine dè pénēta kaì asthenê. |
Abre tu boca y juzga rectamente, juzga al pobre y al débil. |
V. 1 Basiléōs jrēmatismós. El nominativo puede ser traducido por “oráculo o anuncio, decreto o documento escrito” (cf. 2 Mac 2,4 = oráculo; 2 Mac 11,17 = documento escrito). Se ha sugerido leer la expresión Basiléōs jrēmatismós en este contexto por “decreto del rey” basado en el uso de la palabra jrēmatismós en Egipto de la época tolemaica29. Traducimos por “oráculo del rey” teniendo en cuenta la semántica y el contexto temático de la colección.
V. 2. El verbo añadido tērḗseis puede ser elíptico en los hemistiquios b-d-e30, pero en el género proverbio es preferible la brevedad. Según la morfología, téknon puede ser nominativo o acusativo y ambos pueden funcionar como si fueran vocativo (cf. Sal 21,1; 32,2)31. Prōtogenés es un acusativo usado en lugar del vocativo (cf. Sal 51,6)32.
V. 3b. La fórmula eis hysteroboulían. Aquí la preposición eis con acusativo se usa en lugar de dativo (cf. Ex 9,21 y 1 Cor 16,1)33. Traducimos: “para luego reflexionar” o bien, “para luego arrepentirte”.
Un cotejo atento entre Pr 31,1-9TM y Pr 31,1-9LXX revela que el traductor ha combinado las técnicas de traducción libre y literal. El principio más consensuado para hablar de una traducción literal se cumple en la colección: el orden de las palabras34. Los extremos de cada estico coinciden con la disposición de los mismos en el TM, excepto en el v. 4.
Procedemos a la comparación de ambas versiones siguiendo el orden de los versículos hasta el v. 3 y a continuación desplegamos nuestra sugerencia al problema planteado con los argumentos a su favor.
Dibrê lemû’ēl melek maśśā’ ’ăšer-yisserattû ‘immô. |
Hoi emoì lógoi eírēntai hypò Theoû, basiléōs jrēmatismós, hòn epaídeusen hē mḗtēr autoû. |
La LXX atestigua hoi emoì lógoi eírēntai hypò Theoû donde el TM tiene dibrê lәmû’ēl35. La vocalización del nomen regens (dәbārai) diverge de la del TM y el nomen rectum parece una interpetación. Tal vez, el traductor de la LXX ha leído lәmô ’ēl donde el TM tiene lәmû’ēl36. Sea como fuere, el traductor ha silenciado el nombre propio. A juicio de algunos autores, a través de dicha operación buscaban evitar la adjudicación de la colección a otro sabio que no fuera Salomón37, legitimar la Palabra de Dios (cf. vv. 1.2.8)38 y justificar el ensamblaje de los materiales con títulos anónimos y desconocidos.
De todos modos, el cambio semántico del verso es relevante y radica en la lectura teológica que recibe la cadena constructa del TM: “Palabras de Lemuel” con “mis palabras fueron dichas/pronunciadas por Dios”. Es una alteración parcial, el significado permanece en el campo de la dicción. El griego sigue el orden de las palabras del verso pero modifica la relación gramatical entre las palabras hebreas melek maśśā’, expresión separada gramaticalmente en el TM por el acento aṯnaḥ, “... rey; lección” y le confiere un nuevo sentido: basiléōs jrēmatismós “oráculo del rey”. El traductor no solo respeta la secuencia de tales sustantivos sino también la función sintáctica de melek con dibrê lәmû’ēl. Al parecer, ha interpretado lәmû’ēl como genitivo subjetivo y transforma el nombre propio dotando una notable innovación al título de la colección.
El v. 1b jrēmatismós hòn epaídeusen hē mḗtēr autoû guarda una equivalencia a nivel semántico y sintáctico con la lectura del TM. El pronombre relativo hòn retoma jrēmatismós e indirectamente todo el hemistiquio precedente y es el complemento directo de epaídeusen, una de las posibles funciones gramaticales desempeñada en el TM39.
El verbo paideúō puede tomar el acusativo de la persona o del objeto. Si atendemos al v. 2 la expresión téknon emês koilías no indica necesariamente el género del hablante (cf. 2 Sam 16,11). Entonces, no queda claro quién habla en los ulteriores proverbios. Pareciera que fuera el rey quien se dirige a su hijo40 como ocurre en el título modificado de Pr 30,1a: “A mis palabras, hijo, teme” toùs emoùs lógous hyé fobḗthēti. Las cabeceras de estas colecciones dependen del título general del libro atribuido a un único autor: el rey Salomón (cf. Pr 1,1).
El traductor de Pr 31,1a se ha esforzado en declarar la autoría salomónica de la colección sin conseguirlo íntegramente a causa del segundo hemistiquio que la adjudica a la madre del rey. Por tanto, la grieta semántica y sintáctica de 31,1 sería un vestigio de la intención interpretativa y modificación deliberada del contenido de la colección. En última instancia no será ni el monarca ni su madre la fuente de la instrucción real sino Dios mismo. La frase hoi emoì lógoi eírēntai hypò Theoû es equivalente semánticamente a la estereotipada fórmula del mensajero: maśśā’ Yhwh (Jer 23,33), dәbar-Yhwh (Nm 11,24; Za 9,1; 12,1); nә’um Yhwh (Nm 14,28; 1 Sam 2,30; 2 Re 9,26) y, por consiguiente, la lectura teológica del título debe ser adrede.
La frase hoi emoì lógoi rebosa, estilísticamente, de asonancia. Es uno de los juegos poéticos que el traductor emplea hasta el último verso de la colección: kaì krîne dikaíōs diákrine (v. 9). Nótese también la repetición de iniciales, una de las modalidades estilísticas sobresalientes del libro (cf. 1,3; 4,1; 11,28; 15,53; etc.)41, indicios de su formación literaria42. El papiro 149 y el ms 260 atestiguan en Pr 31,1b edídaxen en lugar de epaídeusen.
En resumen, las dos modificaciones operadas en la traducción del texto hebreo de Pr 31,1 al griego permiten a la colección sustentar el origen divino del oráculo regio sin negar el origen materno del mismo tal como aparece en el TM. Tuvo probablemente como referencia un texto hebreo muy cercano al TM. ¿Cómo se explica la orientación de la traducción? ¿A qué se debe esta discrepancia tan notable?
mah-berî mah-bar-biṭnî meh-bar-nedārāy |
Tí téknon tērḗseis? tí? rhḗseis Theoû Prōtogenés, soì légō, hyé tí téknon emēs koilías? tí téknon emōn eujōn? |
El v. 2 es el proverbio de la colección en griego que alberga mayor cantidad de material añadido y, a primera vista, es uno de los esticos que se aleja considerablemente del TM. Un análisis comparativo entre ambas formas manuscritas, sin embargo, descubre que la versión griega refleja la totalidad de los elementos contenidos en el TM, salvo el sufijo del inicial berî43. Obviando las adiciones –que las trataremos más adelante–, pueden distinguirse los dos niveles de la traducción literal identificables en la Septuaginta, es decir, la correspondencia lexical-semántica y sintáctica44 del trístico:
tí téknon = mah-berî
tí téknon emēs koilías = mah-bar-biṭnî
tí téknon emōn eujōn = meh-bar-nedārāy
El material incorporado ha sido insertado ingeniosamente en el verso. Tal como está construido el proverbio griego, los nuevos hemistiquios no son autónomos. Veámoslo a tres niveles:
Sintáctico: el imperativo tērḗseis es como un puente, pertenece al primer hemistiquio y pide ser considerado en los dos últimos. El complemento directo de este verbo: rhḗseis Theoû, se halla en estrecha conexión temática con hoi emoì lógoi eírēntai hupò Theoû del versículo precedente.
Semántico: el uso de prōtogenés y hyié implica un incremento del campo semántico de la filiación, nótese que no se repite téknon. El primer vocativo especifica el sustantivo y el segundo anticipa las ocurrencias sucesivas. Hay unidad semántica interna: el verbo légō pertenece al mismo campo semántico de rhḗseis.
Estilístico: la mitad del material añadido aumenta la carga sonora por la aliteración y repetición de iniciales formadas por: tí téknon tērḗseis tí rhḗseis Theoû / tí téknon / tí téknon.
Resumiendo, el traductor ha combinado brillantemente motivos semánticos y estilísticos en las frases añadidas y las ha tejido perfectamente a nivel sintáctico. Pero, ¿por qué ha introducido en el estico la idea de observar la Palabra de Dios?
’al-titēn lannāšîm ḥêlekā ûderākèkā lamḥôt melākîn. |
mḕ dôi gynaixì sòn ploûton kaì tòn sòn noûn kaì bíon eis hysteroboulían. |
El hemistiquio A reproduce la secuencia de las palabras, la semántica y la sintaxis del TM45. Llamativa es la cancelación del artículo del complemento indirecto: lannāšîm. El segundo hemistiquio presenta una parcial correspondencia sintáctica con el TM. Atestigua dos frases de estructura paratáctica en el lugar que corresponde a dérek: kaì tòn sòn noûn kaì bíon y parece que ha sustraído la extraña expresión y ha clarificado su ambigüedad46. Ha creado un hemistiquio con un nuevo contenido y de estructura compacta a nivel sintáctico como estilístico: kaì tòn sòn noûn kaì bíon eis hysteroboulían. Constituye una cadena sindética de acusativos. Notable es la prevalencia del criterio estilístico en la construcción del hemistiquio. La expresión eis hysteroboulían (l mlkyn) es un sintagma preposicional en acusativo en lugar de dativo, caso que habría menguado el efecto sonoro de la fórmula. En la misma línea puede colocarse –ruptura de aliteraciones heterogéneas– la decisión del traductor por kaì tòn sòn noûn en lugar de kaì tàs sé hodoùs (singular: tḕn se hodòn) que equivaldría a ûderākèkā pues en Proverbios derek generalmente es traducido por hodós (cf. 1,15.31; 2,8.12.13; 3,6.17.23.31; 4,11a.14.19; 5,8.21; 6,6.23, etc.). En algunos pocos casos con tríbos (cf. 2,20); trojiá (cf. 4,12b) y diódos (cf. 7,8).
Es preciso, sin embargo, explicar no solo la disolución del paralelismo poético hebreo en aras del efecto sonoro sino sobre todo el cambio semántico que encontramos desde el v. 1. El examen crítico permite pensar que se trata de una modificación deliberada del traductor-intérprete. El v. 1 anuncia los dos intereses de atención: la palabra de Dios y el rey. El v. 2 clarifica el objeto de la observancia y retoma el v. 1a.
El aprecio por la figura del monarca es una constante en la obra; algunos mešalîm han sido modificados a su favor (cf. 19,12; 20,8a; 25,15a; 30,31). Mayor contribución al desarrollo del tema constituye 24,21-22 y sus añadidos 22a-e donde se presenta al rey que ostenta la ley divina en la tierra, fundamento de la obediencia debida a su persona. En efecto, el hincapié de preservar la figura del rey es evidente en muchos detalles de la colección. El traductor ha tenido cuidado en reproducir solamente los sufijos que hacen referencia al monarca y su madre:
v. 1 ’immô = hē mḗtēr autoû.
v. 2 bar-biṭnî = téknon emês koilías / bar-nәdārāy = téknon emôn eujôn.
v. 3 ḥêlekā = sòn ploûton / dәrākèkā = tòn sòn noûn.
vv. 8-9 pîkā = sòn stóma.
Ha omitido, sin embargo, los dos sufijos posesivos de los tristes y débiles: v. 6 rîšô wa῾ămālô = tês penías kaì tōn pónōn.
Como bien afirma Rodríguez Torné a propósito del libro de los Proverbios y sus detalles textuales, “los pequeños cambios semánticos encontrados en el vocabulario griego usado en LXX se pueden relacionar con el concepto helenístico de la institución de la monarquía y la figura del rey”47. La cultura literaria griega del traductor ha influido en el texto traducido, lo que es un consenso entre los estudiosos48; el interés de traducir era tanto para uno mismo y así transmitir sus ideas como para los otros a fin de que comprendan, aseveran Hinnocent Himbaza y Adrián Schenker49. En el caso de las alteraciones contenidas en Pr 31,1-9LXX respecto al TM la influencia de la cultura griega no explica completamente las alteraciones semánticas. Por ello, queremos sugerir que esta divergencia con el TM es comprensible no solamente en base al trasfondo de la formación helenística del traductor50 sino, sobre todo, a su cultura escriturística. Hay un cierto consenso entre los autores de que la eliminación del nombre propio de Pr 30,1 y Pr 31,1.4 obedece al plan del traductor que coloca toda la obra bajo el patronazgo de Salomón51.
El escollo más grande no ha sido tratado hasta hoy día y, a nuestro parecer, este constituye la orientación marcadamente teológica del contenido de la colección52. Esta temática se halla presente en el TM; es expresada de modo velado con el nombre del rey (Lemû’ēl /Lemô’ēl vv. 1.4), fruto de los votos de su madre (v. 2) y destinatario de las enseñanzas versadas, principalmente, sobre la protección de los pobres y miserables, misión del monarca como lugarteniente de Dios53. En la versión griega, la dirección teológica de la instrucción real recibe un desarrollo notable y sugerimos explicar la novedad como obra del traductor influenciado por la emblemática tradición contenida en 3 Re 3,4-28, es decir la oración Salomón (vv. 4-14)54 y el primer signo definitorio de ser el rey más sabio de Israel: su modo sin precedentes de administrar la justicia (vv. 16-28).
En esta empresa del traductor es preciso considerar el carácter sagrado del texto, que a juicio de Schenker, influye en las modificaciones de los textos a la hora de traducir:
La sacralité du texte a sans doute influencé l’attitude de ses gardiens et de ses scribes. Ceux-ci se sont trouvés, selon les cas, dans l’obligation de modifier le texte, à cause du respect qu’on lui devait. Le principe est le suivant: parce qu’un texte est sacré, on le change, par exemple pour éviter qu’il choque le lecteur parce qu’il est saint, on le complète pour lui donner une autre orientation théologique jugée plus approprié à Dieu et à sa révélation. C’est le paradoxe qu’une écriture sainte appelle la modification parce qu’elle est sainte. Cette explication éclairerait mieux certains phénomènes. (…). Il faut cependant faire une distinction entre les milieux. Ce n’est pas n’importe quel milieu qui s’autorise à procéder à une retouche visant à donner une orientation théologique différent au texte. Il faut probablement faire une distinction entre une instance possédant la compétence et l’érudition d’une part et l’autorité religieuse d’autre part. C’est cette deuxième qui avalise la première, mais elles ne se confondent pas nécessairement. La garde et transmission des Écritures est sous la responsabilité d’une communauté de personnes qui a une autorité et qui s’adresse à ses membres55.
El libro de los Reyes fue traducido al griego56 probablemente hacia el siglo ii a. C. en Alejandría de Egipto57. Sería entonces anterior a la traducción58 del libro de los Proverbios, colocada generalmente cerca del año 150 a. C. en Alejandría59 e incluso alrededor del 100 a. C.60. Recordamos que 3 Re presenta un texto que discrepa considerablemente del 1 Re TM61; entre las diferencias notables en los diez primeros capítulos descuellan los dos añadidos o resúmenes o misceláneas62 de 2,35 y 2,4663. Las primeras adiciones subrayan el don la sabiduría de Salomón recibido del Señor, primero en su construcción y luego en el alcance de su gobierno:
2,35a-b. Y el Señor le dio a Salomón inteligencia (frónēsin) y sabiduría (sofían) muy grande y amplitud de corazón (kardías) como la arena que está junto al mar. Y la inteligencia (frónēsis) de Salomón se multiplicó grandemente por encima del discernimiento (frónesis) de todos los jefes y sobre todos los sensatos (frónimos) de Egipto.
2,46a Y el rey Salomón era muy sensato (frónimos) y sabio (sofós) y Judá e Israel eran muchos como la arena que está junto al mar en gran número, comiendo y bebiendo y siendo felices. Y Salomón era el principal de todos los reinos, y estaban trayendo regalos, y estaban sujetos a Salomón todos los días de su vida64.
Evidente es que ambos retoman ideas conocidas que subrayan la relevancia de la figura de Salomón en el mismo libro de los Reyes y otros libros bíblicos acerca de su sabiduría65. Es un detalle que nos permite asumir el criterio de considerar el bagaje religioso-bíblico del traductor de PrLXX y, que a nuestro parecer, explicaría las divergencias textuales y de contenido, sobre todo de orden teológico, entre el TM y la LXX de nuestra colección. De hecho, pasajes como 3 Re 5,9-14; 10–13 son los que sustentan el hecho de que la traducción griega de Proverbios haya osado atribuir todo el libro a Salomón66, el rey sabio, por excelencia, y acabado administrador de la justicia67.
Los argumentos que hablan a favor de la sugestión:
1) La solemne frase inicial de 31,1: “mis palabras fueron dichas / pronunciadas por Dios” parece hacerse eco de la oración de Salomón según 3 Re 3, presentada en contexto de sueño y teofanía (3 Re 3,5). En ella se refiere expresamente que Dios ha hablado a Salomón: “y el Señor le dijo” kaì eîpen kýrios pròs autòn (3 Re 3,5), algo inusual en el libro de los Reyes. La colección de las Palabras de Agur de Pr 30,1-14 en la LXX se convierten en palabras de Salomón; en el v. 3a el rey afirma: “Dios me ha enseñado la sabiduría” (Theòs dedídajen me sofían). Referencia de este proverbio podría ser, según Jüngling, 3 Re 5,9 que afirma: “Dios ha concedido a Salomón entendimiento y mucha sabiduría (sofían pollēn)” y sugiere la posibilidad de reconocer una tendencia apologética en el libro, sobre todo en los títulos modificados de Pr 30,1-3 y Pr 31,168. La colección de Pr 31,1-9LXX se presenta en su cabecera como instrucción regia/materna de carácter divinamente inspirado y por tanto, la sabiduría contenida es de origen divino, un rasgo ausente en la colección en su versión hebrea y presente en 3 Re 369.
2) Los añadidos del v. 2. tērḗseis? tí? rhḗseis Theoû
prōtogenés, soì légō, hyé
La modificación más notable es la orientación marcadamente teológica del verso con la idea de la observancia de la Palabra de Dios que se retomará en el v. 8 y ya había sido puesta en evidencia en el v. 1. De hecho “no es la única vez que el traductor teologiza un proverbio (cf. Pr 15,28a.29a; 21,8; 22,11)”70. ¿Cómo se explica esta tendencia en el libro, en concreto, en nuestra colección?
En la tesis doctoral hemos ofrecido varias propuestas de esclarecimiento de las divergencias entre el TM y la LXX contenidas en el v. 271, pero ninguna nos parece que responda cabalmente al interrogante. Si consideramos 3 Re 3 se abre una posible vía de explicación. En el v. 14 el Señor le dice a Salomón: “si andas en mi camino observando mis preceptos y mandamientos (fylássein tàs entolás mou kaì tà prostágmatá mou = 3 Re 9,4) como anduvo David tu padre, prolongaré tus días”. El verbo griego usado es fylássō; destacamos que en PrLXX tēréō es empleado como sinónimo de fylássō (cf. 2,11; 19,16) igual que šmr y nṣr en PrTM (13,3a; 16,17). Así en 7,5; 8,32 tēréō traduce la raíz šmr, mientras que en 2,11a; 3,1b; 4,6b.23a tēréō se corresponde a la raíz nṣr y en 2,11a; 8,34 fylássō traduce šmr.
Los mandamientos y preceptos referidos en 3 Re 3,14 forman parte de la Palabra de Dios en su acepción “Ley de Moisés” (cf. Dt 5,1-22). En 3 Re 2,1-3 David antes de morir pone al conocimiento de Salomón que la monarquía está subordinada a las exigencias de la ley mosaica:
Y guardarás la ordenanza del Señor tu Dios, andando en sus caminos, y guardando sus preceptos (fylássein tàs entolàs autoû), y sus derechos (kaì tà dikaiṓmata), y sus testimonios como está escrito en la ley de Moisés (tà gegramména en nómōi Mōyséōs), para que tengas entendimiento en todo lo que hicieres y en todo aquello que emprendieres (3 Re 2,3).
3) La traducción del v. 3b: kaì tòn sòn noûn kaì bíon eis hysteroboulían.
ûderākèkā lamḥôt melākîn
En el segundo miembro del v. 3, la LXX atestigua dos objetos directos: kaì tòn sòn noûn kaì bíon. Las recensiones de Áquila, Símaco y Teodoción tienen: tà sà jrḗmata y el ms. Amiatinus de la Vg: divitias tuas “tus bienes, tus riquezas”, lecturas que no necesariamente presuponen una Vorlage hebrea diferente. Es posible pensar que sea una asimilación al hemistiquio precedente (ḥayil). En efecto, el primer hemistiquio es totalmente reproducido en griego bajo la acepción de ḥayil como “riqueza” (ploûton). Si consideramos la traducción desde la triada: sòn ploûton kaì tòn sòn noûn kaì bíon se abre una posible vía de explicación. Es una expresión que no hemos hallado en otra parte de la LXX, la más cercana es Pr 22,4 “nacimiento de la sabiduría, el temor del Señor y riqueza (kaì ploûtos) y gloria (kaì dóxa) y vida (kaì zōḗ)”. Aquí la triada son dones de la sabiduría; los posee quien ha sido beneficiado con la sabiduría. El segundo vocablo no coincide semánticamente con nuestro verso. En 3 Re 3,11 en la respuesta de Dios a Salomón son mencionadas tales ideas en una serie de frases interconectadas. En la LXX es la única vez que son empleadas de esta manera y relacionadas a una figura real, el monarca más sabio de Israel (cf. 3 Re 3,28; 5,9-14; 10,1-10). Una cierta correspondencia lexical y semántica72 puede ser alegada: “y le dijo el Señor: ya que me has pedido esto y no has pedido para tí muchos días (hēméras pollàs) ni has pedido riqueza (ploûton) ni has pedido la vida (psijàs) de sus enemigos sino has pedido para tí inteligencia (sínesin) para escuchar juicio”.
“Muchos días... riqueza... vida de tus enemigos... inteligencia”. Coincidencias lexicales y semánticas con Pr 31,3 son significativas. En 3 Re 3,14 una de las consecuencias de la observancia de los mandamientos de Dios: “prolongaré tus días” (tàs hēméras sou) es semánticamente equivalente al concepto de “vida” (bíon) en el libro de los Proverbios (cf. 3,2.16; 4,10; 5,9; 31,12). Y a propósito de la cuestión de “la vida de los enemigos del rey”, ofrecemos dos datos textuales que podrían ayudar a la comprensión:
a) El tema de los enemigos del rey Salomón parece que tuvo su proceso de desaparición con el desarrollo de la idealización de su figura73. Así en 3 Re 2,33 del Texto Antioqueno (verso ausente en el TM y en contraste con el dato de 1 Re 11,14 = 3 Re 11,14) se dice: “no había enemigos (satán) en todos los días de Salomón”74. Este elemento, quizás, teniendo en cuenta la idealización de la figura de Salomón, podría dar cuenta porqué el traductor del Proverbios eliminó del v. 3 la idea de destrucción de los reyes que se encuentra detrás de la expresión: lamḥôt75 mәlākîn y tradujo por eis hysteroboulían.
b) La expresión eis hysteroboulían coincide, a nivel semántico, con la lectura atestiguada en la recensión de Teodoción: eis metamélein “hacia un arrepentimiento”. Se piensa que podría venir de lenōḥam melāakîn o bien de lenaḥămôt76. Cook sugiere que la idea de la destrucción de reyes posiblemente haya creado problema al traductor, que procedió a eliminar la idea a través del recurso a la paráfrasis. En esta operación se sirvió seguramente de una de las acepciones del significado de la raíz mḥh “borrar de la memoria” y acuñó el término hysteroboulía para expresar el matiz de remordimiento77. De modo que esta traducción nos ubicaría ya en los tiempos en que se procede a la idealización del rey Salomón como rey de paz. El traductor, en cambio, no ha modificado el primer hemistiquio que contiene el tema de la relación con las mujeres; también el libro 3 Re lo conserva y lo menciona reiteradamente, a veces, ligada a su infidelidad a la alianza davídica (cf. 5,14a-b; 7,45; 11,1-2.4.7)78.
4) En el v. 4 Mezzacasa constató hace más de un siglo: “Eccetto per boulēs facilmente identificabile in mlkym per le altre parole è difficile precisare un testo e una lettura soddisfacente. I due ultimi stichi sembrano cavati da wlrwzym ’w škr interpretato molto liberamente”79. No es fácil, es verdad, pero es posible reconocer la semántica y la sintaxis del texto hebreo de referencia del traductor80:
’al lamelākîm lәmô’ēl ’al lamelākîm šetô-yāyin ûlerôzenîm ’ô šēkār |
metà boulês pánta poíei, metà boulês oinopótei hoi dynástai thymṓdeis eisín, oînon dè mḕ pinétōsan, |
Como podremos apreciar a continuación, casi la totalidad de las palabras del TM son reproducidas en griego. El primer hemistiquio puede ser el resultado de la comprensión de la palabra mәlākîm en el mismo sentido del v. 3, es decir, en su significado en arameo81 y la modificación del adverbio de negación ‘al en la preposición metá proponemos comprenderla en el marco de la sobrevaloración de la figura del rey en la obra. Estas alteraciones en la traducción deben ser intencionadas porque en el resto de las ocurrencias de melākîm en Pr, la palabra es traducida por basileús (cf. 8,15; 16,12.13; 22,29; 25,2.3). En todos estos casos, la figura de los reyes –y también de hoi dynástai – es altamente positiva82. Son muy interesantes los proverbios alterados en favor de hoi dynástai en 1,21; 8,3; 17,26. Tales datos nos mueven a pensar que el traductor deliberadamente haya cambiado, por un lado, la prohibición de la bebida en moderación para el rey y, por otro, haya especificado el tipo de hoi dynástai destinarios de la negativa del vino. Dicho de otro modo, el monarca destinatario de las enseñanzas de la colección en el v. 4 del TM recibe serias exhortaciones sobre uno de los comportamientos que debe evitar y está relacionado con el consumo de las bebidas alcohólicas83 mientras que en la LXX no se le niega beber: lo puede hacer moderadamente (con reflexión). Solo se lo prohíbe a los príncipes iracundos.
Está omitido el nombre del rey lemô’ēl y son añadidas las expresiones: pánta poíei y thymṓdeis eisín. La sustracción del nombre del rey ya fue abordada en el v. 1. La expresión pánta poíei. Según Lagarde pánta sustituye a lemô’ēl, sustantivo leído como si fuera un infinitivo hif arameizado hô’îl84. Cuppi puntualiza que quizás detrás de la suposición está la idea que tal verbo provenga de la raíz y‘l que en el hebreo tardío significaba “realizar /efectuar” (cf. Job 35,3) y pánta subraya el sentido enfático de realizar85. Es preferible atribuir este añadido a la labor creativa del traductor86 es una inserción libre y bien encajado poéticamente. Escúchese la asonancia como ocurre en v. 2: metà boulês pánta poíei, metà boulês oinopótei.
El siguiente añadido es thymṓdeis eisín. Jäger supone que el traductor ha leido ’p en lugar de ’l87. Es razonable pero carece de justificación. Por eso, nuestra crítica sugiere que el traductor ha intentado recuperar la eliminación de la raíz mḥh del verso precedente haciendo metátesis, ḥmh en lugar de mḥh, pues thymṓdēs traduce ḥēmāh en Pr 15,18; 22,24. El fundamento de esta propuesta se halla en el v. 8 de nuestra colección, donde recurre a la misma técnica88. Y por tanto esta operación sería interpretación y de forma deliberada 89.
El verbo oinopóteō es un neologismo y hápax en la LXX90, sugerimos que el poeta lo ha creado fusionando la frase hebrea šetô-yāyin (oînon + potizō)91. Es siempre preferible encontrar la solución en el mismo texto. Al traductor le gusta jugar con la raíz de las palabras: crea un nuevo verbo oinopótei y lo deshace en el siguiente hemistiquio: oînon dè mḕ pinétōsan.
5) El v. 5 no presenta un cambio semántico imposible de reconocer en el TM:
pen-yišteh weyiškaḥ meḥuqqāq wîšannēh dîn kol-benê-‘ōnî |
hína mḕ pióntes epiláthōntai tês sofías kaì orthà kpînai ou mḕ dýnōntai toùs astheneîs. |
El verso del TM se circunscribe enteramente al campo judicial en favor de los oprimidos: “no sea que beba y olvide lo decretado y cambie el derecho de todos los oprimidos”. La LXX le confiere un matiz estrictamente sapiencial al leer sofías (sabiduría) en lugar de meḥuqqāq “lo decretado”. Parece hacerse eco de la estrecha relación existente entre sabiduría y justicia en 3 Re 3,4-14.16-28; en especial del v. 28: “todo Israel oyó el juicio con el que enjuició el rey y reverenciaron al rey, pues vieron que había en él una sabiduría divina para hacer justicia”. En efecto, Salomón 3 Re 3,9, pide al Señor:
Concede, pues, a tu siervo un corazón que sepa escuchar, para juzgar (diakrínein) a tu pueblo en justicia (en dikaiosýnēi), y para discernir entre lo bueno y lo malo. Porque, ¿quién podrá juzgar (dynḗsetai krínein) a este tu pueblo tan grande?
Y en v. 12 leemos: “he aquí que yo haré conforme a tus palabras: te daré un corazón sensato y sabio (fronímēn kaì sofḗn), tal que no ha habido antes de ti otro como tú, ni después de ti se levantará otro como tú”.
Tales datos nos inducen a pensar que la exhortación de “no olvidar la sabiduría” de Pr LXX 31,5a sería un eco de la oración de Salomón donde la sabiduría para el buen gobierno y la administración de la justicia concedida al monarca es un don de Dios.
El modo de juzgar, en nuestro versículo, es expresado por medio del adverbio orthà “rectamente” que bien podría ser sinónimo y traducción de la locución preposicional de modo dikaiosýnēi “tu justicia” de 3 Re 3,9 pues en Pr 4,25 orthà es empleado en sinonimia con díkaia: “que tus ojos miren derechamente (orthà) y tus párpados pestañeen rectamente (díkaia)”. Del mismo modo la expresión modal del v. 5b kpînai (ou) mḕ dýnōntai podría ser eco de 3 Re 3,9: dynḗsetai krínein. Las aliteraciones y las asonancias son notables en tan breve verso: pióntes epiláthōntai / kaí/ kpînai dýnōntai. No olvidemos que la semántica del proverbio es reconocible en el TM pero considerar 3 Re 3,9 ilumina el aspecto judicial del proverbio en estrecha relación con sabiduría.
6) Los proverbios de los vv. 6-7 reproducen casi en su totalidad los mәšālîm del TM.
6 tenû-šēkār le’ôbēd weyayin lemārê nāpeš |
dídote méthēn toîs en lýpais kaì oînon pínein toîs en odýnais. |
7 yišteh weyiškaḥ rîšô wa῾ămālô lō’ yizkor-῾ôd |
hína epiláthōntai tês penías kaì tôn pónōn mḕ mnēsthôsin éti. |
La LXX en el v. 6a lee toîs en lýpais “a los tristes” donde el TM tiene le’ôbēd, lectura que coincide con Símaco: tō apollyménō “al que va a perecer”, mientras que la LXX concuerda con la Vg: maerentibus, la S92: l’byl’ y el Tg: l’byly “a los tristes, afligidos”. De Waard (BHQ 17) sugiere que estas variantes podrían provenir de una lectura basada en le’ābēl93. En efecto, la concordancia entre la S y el Tg en los consonantes l’bl apoya esta suposición. En síntesis, las variantes alternativas del v. 6a pueden ser explicables teniendo como base el TM94 y la problemática de su interpretación y por tanto, debe ser considerado la forma más antigua.
El v. 6b exceptuando el añadido pínein equivale completamente al TM; el v. 7 contiene una sustracción, el pronombre posesivo de rîšô como lo hemos indicado en páginas precedentes. A nivel estilístico ambos versos reproducen también el contenido del TM95 nótese la formulación del v. 6 sobre paralelismo sinonímico y gramatical:
dídote méthēn / kaì oînon pínein
tenû-šēkār / weyayin
toîs en lýpais / toîs en odýnais.
le’ôbēd / lemārê nāpeš
Asimismo el v. 7 está construido sobre un paralelismo sinonímico y gramatical muy evidente en el primer miembro: epiláthōntai / mḕ mnēsthôsin y en segundo, sobre paralelismo sinonímico: tês penías / tôn pónōn. En ambos versos se aprecia también una bella rima interna, v. 6 y v. 7a con el v. 5a. Esta última refuerza la unidad de los versos96.
7) La traducción del v. 8 contiene una diáfana orientación teológica de modo análogo a los vv. 1-2. Las discrepancias con el TM97 deben ser fruto de opciones deliberadas del traductor:
petaḥ pîkā le’ilēm ’el-dîn kol-benê ḥălôp |
ánoige sòn stóma lógōi Theoû kaì kpîne pántas hygiôs |
La traducción griega atestigua lógōi Theoû “a la Palabra de Dios” en lugar de lә’ilēm “al mudo” del TM, cuya lectio concuerda con las recensiones de Áquila, Símaco y Teodoción: alátōi y con la Vg: muto. La variante de la LXX podría ser fruto de una metátesis, hecha o encontrada por el traductor98. El metaplasmo sería entre el hebreo l’lm y el arameo mlt’99 “palabra”; si se considera la locución hebrea l’lm unida a la preposición siguiente ’l parece respaldar la propuesta. Teniendo en cuenta el contexto, la posibilidad de que la operación sea deliberada para sintonizar con los vv. 1-2 crece, es decir, la metátesis parece ser una técnica de traducción en esta colección. En efecto, la lectio de la LXX es cercana a la traducción de la S que lee bmlt’ dqwšt’ “a la palabra de justicia”. Esta variante sugiere que la LXX opera como la S o bien como supone Fox la S depende, en gran parte, de la LXX100.
Especial atención concede el traductor al tema de la Palabra de Dios cuyo portador es el rey como una especie de oráculo al servicio de la recta administración de la justicia marcada por la sabiduría (v. 5) El texto de Is 11,1-9 uno de pasajes cuya ideología real es muy cercana a Pr 31,1-9TM101 en el v. 4 donde:
El TM dice: “juzgará con justicia a los pobres, y con equidad sentenciará a favor de los afligidos de la tierra. Herirá la tierra con la vara (šēbeṭ) de su boca”.
La LXX lee: “juzgará a los pobres con justicia y sentenciará a los pobres de la tierra y herirá la tierra con la palabra (tôi lógōi) de su boca”.
Por tanto, la modificación ideológica del traductor podría ser de cuño bíblico y se situaría en la línea de algunos libros del AT. Además, una visión de conjunto nos recuerda que, el traductor ha empleado expresiones equivalentes a lógōi Theoû y por tanto, el motivo de la desviación de la lectura del TM puede adjudicarse a la intención del traductor102.
Como puede apreciarse en la transliteración del v. 8b, la LXX atestigua una variante que no está representada en las demás tradiciones manuscritas. La expresión hebrea es oscura: benê ḥălôp103, razón que quizás estimuló el trabajo creativo de los traductores. La LXX tiene el adverbio hygiôs “sanamente”; es un hapax legómenon en la LXX según Cook y d’Hamonville, quienes sugieren que el traductor lo ha tomado, probablemente, de la literatura griega, pues la expresión krínein hygiôs se encuentra en Platón104: oûsa kríneîn hygiôs tà díkaia105. Es una posibilidad pues los autores consideran la expresión pántas hygiôs como variante ajena al resto de las formas del texto; es preciso, en cambio, notar que pántas equivale a kol y el empleo de la raíz hygs (no como adjetivo hygiôs) no es ajeno a la LXX (cf. Lv 13,10.15.16; Job 10,21; Tb 12,3; Sir 17,28; 30,14; Is 38,21) y dada la similitud entre los vv. 8-9, la existencia y valor del hapax legómenon podrían deberse, además, a razones poéticas (anáfora y asonancias, repetición de palabras) entre:
v. 8b kaì krîne pántas hygiôs
v. 9a kaì krîne dikaíōs
Estilísticamente el v. 8 está construido sobre un paralelismo de desarrollo y gramatical: ánoige sòn stóma
krîne pántas hygiôs.
8) El v. 9 reproduce la semántica del TM y también en este verso puede identificarse un eco de 3 Re 3:
petaḥ pîkā šepoṭ-ṣēdeq wedîn ῾ānî we’ebyôn. |
ánoige sòn stóma kaì krîne dikaíōs, diákrine dè pénēta kaì asthenê. |
Tal como está formulado el proverbio es una traducción casi literal, muy cercana al TM. Al mismo tiempo, no parece reflejar 3 Re 3,9 diakrínein tòn laón sou en diakaiosýnēi... krínein tòn laón sou “juzgar a tu pueblo en justicia... juzgar a tu pueblo” como ocurre en el v. 5 en cuanto al empleo de los verbos de la administración de la justicia y su modo de ejecutarla. La primera repetición ánoige sòn stóma es una anáfora y las expresiones kaì krîne dikaíōs, diákrine dè pénēta kaì asthenê hace inclusión con el 5b: kaì orthà kpînai ou mḕ dýnōntai toùs astheneîs, funciones desempeñadas también en el TM106.
Desde el punto de vista estilístico el verso está formulado en paralelismo sinonímico vertical con el v. 8: ánoige sòn stóma / ánoige sòn stóma. kaì krîne pántas hygiṓs /kaì kpîne dikíōs. El estico en su conjunto está construido sobre un paralelismo gramatical y de desarrollo: los verbos en imperativo presente: ánoige / krîne / diákrine.
Dos argumentos más respaldarían la hipótesis de que la Pr 31,1-9LXX contiene eco de 3 Re 3; ambos son de orden estructural o de colocación. El primer argumento es el detalle textual del empalme inmediato de nuestra perícopa con la tercera colección salomónica (25–29) bajo el título: “Estas son las enseñanzas de Salomón, las cuales, mezcladas, las que transcribieron los amigos de Ezequías, rey de Judea” (25,1). La primera perícopa (vv. 2-8)107 de este capítulo está consagrada enteramente a la figura del monarca. Los primeros versos establecen una relación muy estrecha entre Dios y el soberano:
2 La gloria de Dios esconde palabra
y la gloria del rey honra los acontecimientos.
3 El cielo es alto y la tierra es profunda
y el corazón del rey es inescrutable.
Esta constatación nos induce a pensar que el traductor buscó identificar a Lemuel, el monarca “perteneciente a Dios y fruto de los votos de su madre” 108 con el rey Salomón, a quien se le atribuye tales enseñanzas proverbiales.
El segundo es de índole externo que, permitiría clarificar el énfasis sobre la figura de Salomón en el libro de los Proverbios en su versión LXX y su probable relación con 3 Re 3. Se trata de tener en cuenta algunos detalles de la ordenación canónica de los libros en la LXX109 donde el libro de los Proverbios se encuentra antes del libro del Eclesiástes y le sigue el Cantar de los Cantares y Sabiduría de Salomón (Codex Vaticanus y Alexandrinus). En la lista del Codex Alexandrinus (s. v d. C.), al final de todos los libros, después de la II carta de Clemente, aparece también un libro bajo el título de Salmos de Salomón. En el Sal de Salomón 17 es desarrollada la estrecha relación entre el poder de la palabra en boca del rey110. Tanto el Eclesiastés111, el Cantar y la Sabiduría son libros supuestamente de autoría salomónica.
El estudio comparativo de la perícopa ha buscado una explicación razonable de las discrepancias entre el texto griego y el TM de Pr 31,1-9 desde el punto de vista textual, literario y de contenido.
Más allá de la multiplicación de las categorías clasificatorias de las características literarias de la poesía hebrea que reproduce la colección de Pr 31,1-9LXX hemos apreciado que algunas estructuras construidas en paralelismo fueron disueltas para permitir cambios semánticos de modo intencionado. El autor ha combinado hábilmente las técnicas de traducción literal y libre a nivel semántico y sintáctico y no pocas veces a nivel estilístico. Reproduce, en la mayoría de los casos, la secuencia de las palabras del TM. Los cambios operados en el campo semántico son explicables sobre la base de consideraciones teológicas propias de su cultura escriturística que la reconsidera y la relee de modo ingenioso. La tradición de 1 Re 3,4-28 en su versión griega (= 3 Re 3,4-28), cuya época de traducción se ubica un poco anterior a la del libro de los Proverbios, es el texto que ayuda a entender las muchas modificaciones introducidas por el traductor en el texto griego de la colección, cuyo texto hebreo de referencia parece ser muy cercano al TM. Dos centros de interés de la colección son clarificados: la figura idealizada de Salomón y la valoración de su relación con el Señor bajo la observancia de la Palabra de Dios.
Aitken, J. K., “Poet and Critic: Royal Ideology and the Greek Translator of Proverbs”, en T. Rajak – S. Pearce – J. K. Aitken (eds.), Jewish Perspectives on Hellenistic Rulers, Berkeley 2007, 190-204.
Atkinson, K., “On the Herodian Origin of Militant Davidic Messianism at Qumran. New Light from Psalm of Solomon 17”, JBL 118/3 (1999) 435-460.
Avioz, M., “The Books of the Kings in the Recent Research (Part I)”, Currents in Biblical Research 4/1 (2005)11-55.
Baretta, M., “Regni”, en P. G. Borbone, La Bibbia dei Settante. II: Libri storici I (Antico e Nuovo Testamento 15), Brescia 2016, 255-276.
Barr, J., “The Typology of Literalism in Ancient Biblical Translations”, en Nachrichten de Academie der Wissenschaften in Göttingen. Philologisch-Historisch Klasse 11. Mitteilungen des Septuaginta-Unternehmens XV (1979), 279-235.
Barucq, A., Le livre des Proverbes (Sources Bibliques), Paris 1964.
Baumgartner, A.-J., Étude critique sur l’état du texte du livre des Proverbes d’après les principales traductions anciennes. Thèse présentée à la Faculté de Philosophie de l’Université de Leipzig pour le Doctorat, Leipzig 1890.
Beeckman, B., “Proverbia de Animalibus. The Greek Rendering of Hebrew Animal Names in Proverbs”, ZAW 131/2 (2019) 257-270.
Bons, E., “La traducción griega en la actualidad”, en E. Bons – D. Scialabba – D. Cándido (eds.), La Septuaginta. ¿Por qué resulta actual la Biblia griega? (Estudios Bíblicos 65), Estella 2017, 15-33.
Bogaert, P.-M., “La Septante, témoin de la plus ancienne forme conservée de l’histoire de Salomon: 1 Rois (III Règnes) 2 – 14 ”, RTL 34 (2003) 212-217.
Cabello Leiva, G., El Rey Salomón en 1 – 2 Crónicas en comparación con 2 Samuel y 1 Reyes. Dissertation zur Erlangung des Doktorates an der Theologischen Fakultät der Universität Innsbruck, Innsbruck 2013.
Cañas Reíllo, J. M., “El libro de los Proverbios. Introducción”, en N. Fernández Marcos – M. V. Spottorno Díaz-Caro (eds.), La Biblia Griega Septuaginta. III: Libros poéticos y sapienciales (Biblioteca Estudios Bíblicos 127), Salamanca 2013, 273-284.
Cignelli, L. – Pierri, R., Sintassi di Greco Biblico (LXX e NT). Quaderno I.A Le concordanze (Analecta SBF 61), Jerusalem 2003.
Cimosa, M., Proverbi. Nuova versione, introduzione e commento (I Libri Biblici. Primo Testamento 22), Milano 2007.
–, Guida allo studio della Bibbia Greca (LXX). Storia – Lingua – Testi, Roma 1995.
Clifford, R. J., “Observations on the Text and Versions of Proverbs”, en M. L. Barré (ed.), Wisdom, You Are My Sister. Studies in Honor of Roland E. Murphy, O. Carm., on the Occasion of his Eightieth Birthday (CBQ Series. Monograph Series 29), Washington 1997, 49-56.
Conybeare, F. C. – Stock, St. G., Grammar of Septuagint. With Selected Readings, Vocabularies, and Updated Indexes, Boston 21995.
Cook, J., “Contextuality and the Septuagint”, HTS Teologiese Studies/Theological Studies 75/3 (2019) a5029, 1-7. https://doi.org/10.4102/hts.v75i3.5029.
–, “Semantic Considerations and the Provenance of Translated Units”, en M. K. Peters (ed.), XIII Congress of the International Organization for Septuagint and Cognate Studies Ljubljana, 2007 (SBL 55), Leiden – Boston 2008, 67-87.
–, “Proverbs. To the Reader”, en A. Pietersma – B. G. Wright (eds.), A New English translation of the Septuagint. And the Other Greek Translations Traditionally Included under That Title, New York – London – Oxford 2007, 556-591.
–, “Theological/Ideological Tendenz in the Septuagint – LXX Proverbs. A Case Study”, en F. García Martínez – M. Vervenne, Interpreting Translation. Studies on the LXX and Ezekiel in Honor of Johan Lust (BEThL 192), Leuven – Paris – Dudlay, Ma 2005, 65-79.
–, “The text-critical value of the Septuagint of Proverbs”, en R. L. Troxel – K. Friebel – D. R. Magary (eds.), Seeking out the Wisdom of the Ancients. Essays in honor of Michael V. Fox on the occasion of his sixty-fifth birthday, Winona Lake, Indiana 2005, 407-419.
–, “The Translator(s) of the Septuagint of Proverbs”, Journal of Biblical Textual Criticism 7 (2002) 1-50.
–, “Unit Delimitation in the Book of Proverbs. In the Light of the Septuagint of Proverbs”, en M. C. A. Korpel – J. M. Oesch (eds.), Studies in Scriptural Unit Division (Pericope 3), Koninklikje van Gorcum 2002, 46-65.
–, “Ideology and Translation Technique. Two Sides of the Same Coin?”, en R. Sollamo – S. Sipilá (eds.), Helsinki Perspectives on the Translation Technique of the Septuagint, Helsinki – Göttingen 2001, 195-210.
–, The Septuagint of Proverbs Jewish and/or Hellenistic Proverbs? Concerning the Hellenistic Colouring of LXX Proverbs (Suppl. VT 69) Leiden – New York – Köln 1997.
–, “Aspects of the Translation Technique followed by the Translator of the LXX Proverbs”, JNSL 22/1 (1996) 143-153.
–, “Are the Syriac and Greek Versions of the ishah zarah (Prov 1 to 9) Identical? (On the Relationship between the Peshitta and the Septuagint)”’, Textus 17 (1994) 117-132.
–, “The dating of Septuagint Proverbs”, ETL 69/3 (1993) 383-399.
Cuppi, L., “The Treatment of Personal Names in the Book of Proverbs from the Septuagint to the Masoretic Text”, en T. M. Law – A. Salvesen (eds.), Greek Scripture and the Rabbis (Contributions to Biblical Exegesis Theology 66), Leuven 2012, 19-38.
de Lagarde, P. A., Anmerkungen zur griechischen Übersetzung der Proverbien, Leipzig 1863.
de Vries, S. J., 1 Kings (WBC 12), Waco – Texas 1985.
de Waard, J. (ed.), Proverbs (Biblica Hebraica Quinta 17), Stuttgart 2008.
–, “Some Unusual Translation Techniques Employed by the Greek Translator(s) of Proverbs”, en R. Sollano– S. Sipilä, Helsinki Perspectives on the Translation Technique of the Septuagint, Helsinki 2001, 185-193.
–, “The Septuagint of Proverbs as a Translational Model?”, The Bible Translator 50/3 (1999) 304-314.
Díez Merino, L., Targum de Proverbios. Edición Príncipe del Ms. Villa-Amil nº. 5 de Alfonso de Zamora (Biblioteca Hispana Bíblica 11), Madrid 1984.
Elliger, K. – Rudolph, W. (eds.), Biblia Hebraica Stuttgartensia, Stuttgart 51999.
Fernández Marcos, N., La Bibbia dei Settanta. Introduzione alle versioni greche della Bibbia (Introduzione allo studio della Bibbia. Supplementi 6), Brescia 2000.
Field, F. (ed.), Origenis Hexaplorum quae supersunt, sive veterum interpretum graecorum fragmenta, post Flaminium Nobilium, Drusium, et Montefalconium, adhibita etiam versione Syro-Hexaplari, concinnavit, emendavit, et multis partibus auxit III, Oxonii 1875, 309-376.
Fox, M., Proverbs / mšly. An Eclectic Edition with Introduction and Textual Commentary (HBCE 1), Atlanta 2015.
–, “How the Peshitta of Proverbs uses the Septuagint”, JNSL 39/2 (2013) 37-56.
–, Proverbs 10 – 31. A New Translation with Introduction and Commentary (The Anchor Yale Bible 18B), New Haven – London 2009.
–, “LXX-Proverbs as a Text-Critical Resource”, Textus 22 (2005) 95-128.
Gelerman, G., Studies in the Septuagint. Proverbs III, Lund 1956.
Gilbert, M., “La structure de la prière de Salomon (Sg 9)”, en La Sagesse de Salomon. The Wisdom of Solomon. Recueil d’études. Collected Essays (AnBib 189), Roma 2011, 167-201.
Gooding, D. W., “Problems of Text and Midrash in the Third Book of Reigns”, Textus 7 (1969) 1-29.
Harl, M. – Dorival, G. – Munnich, O., La Bible grecque des Septante. Du judaïsme hellénistique au christianisme ancien, Paris 1988.
d’Hamonville, D.-M., Les Proverbes. Traduction des textes grecs de la Septante, introduction et notes (La Bible d’Alexandrie LXX 17), Paris 2000.
Holmes, R. – Parsons, J. (eds.), Vetus Testamentum Graecum cum variis lectionibus III, Oxonii 1823.
Himbaza, I. – Schenker, A., “Du texte à la théologie. Synthèse et perspectives”, en Un carrefour dans l’histoire de la Bible. Du texte à la théologie au IIe siècle avant J.-C.(OBO 233), Fribourg – Göttingen 2007, 131-142.
Institutum Peshittonianum Leidense (ed.), Proverbia – Sapientia Salomonis – Ecclesiastes – Canticum Canticorum II.5, Leiden 1979, 1-55.
Jäger, J. G., Observationes in Proverbiorum Salomonis Versionem Alexadrinam, Lipsiae 1788.
Joosten, J., “The Origin of the Septuagint Canon”, en S. Kreuzer – M. Meiser – M. Sigismund (eds.)., Die Septuaginta – Orte und Intentionen (WUNT 361), Tübingen 2016, 688-699.
–, “Textual Plurality at the Margins of Biblical Texts. The Miscelanies in 3 Reigns 2,35.46”, RevQ 30/2, No. 112 (2018) 293-307.
Jüngling, H.-W. – von Lips, H. – Scolarick, R., “Paroimiai Proverbia / Sprichwörter / Sprüche Salomos”, en M. Karrer – W. Kraus, Septuagint Deutsch. Erläuterungen und Kommentare zum griechischen Alten Testament. II: Psalmen bis Daniel, Suttgart 2011, 1950-2000.
Jüngling, H.-W., “Paroimiai / Proverbia / Sprichwörter / Sprüche Salomos”, en S. Kreuzer (ed.), Einleitung in die Septuaginta (Handbuch zur Septuaginta 1), Gütersloh 2015, 375-388.
Kaminka, A., “Septuaginta und Targum zu Proverbia”, HUCA 7-8 (1931-1932) 169-191.
Kynes, W., “Wisdom Defined Through Narrative and Intertextual Network: 1 King 1 – 1 and Proverbs”, en K. Dell – W. Kynes (eds.), Reading Proverbs Intertextuality (LHBOTS 629), London – New York 2019, 35-47.
Lavoie, j., “Vin et bière en Pr 31,4-7”; Studies in Religion / Sciences Religieuses 44 (2015) 33-54.
Lemmelijn, B., “L’importance de la Septante dans une nouvelle ère de la Critique Textuelle”, Perspectiva Teológica 52/1 (2020) 15-32.
Lemmelijn, B. – Ausloos, H., “Septuagint Stuides in Louvain”, en K. Spronk (ed.), The Present State of Old Testament studies in the low Countries. A Collection of Old Testament studies published on the occasion of the seventy-fifth anniversary of the Oudtestamentisch Werkgezelschap (OTS 69), Leiden – Boston 2016, 145-158.
Mancuello González, W., La lección de una madre hebrea. Exégesis de Pr 31,1-9 (Suplementos de la Revista Bíblica 4), Buenos Aires 22018.
Mezzacasa, G., Il libro dei Proverbi di Salomone. Studio critico sulle aggiunte Greco-alessandrine, Roma 1913.
Milán, F., “Biblia e intertextualidad: una aproximación”, Scripta Theologica 48 (2016) 357-379.
Monachi abbatiae pontificiae sancti Hieronymi in Urbe ordinis sancti Benedicti (eds.), Biblia sacra iuxta latinam Vulgatam versionem. XI, Romae 1958, 24-125.
Morla Asensio, V., Libros sapienciales y otros escritos (Introducción al Estudio de la Biblia 5), Estella 1994.
Moro, C., “Ascolta la mia parola”. Analisi testuali di Proverbi 22,17 – 24,22 (Studi Semitici Nuova Serie 17), Roma 2002.
–, “Paroimiai Proverbi. Introduzione, traduzione e note”, en C. Martone, La Bibbia dei Settanta. III: I libri poetici (Antico e Nuovo Testamento 16), Brescia 2013, 457-617.
Olofsson, S., The LXX Version. A Guide to the Translation Technique of the Septuagint (Coniectanea Biblica. Old Testament 30), Stockholm 1990.
–, Translation Technique and Theological Exegesis. Collected Essays on the Septuagint Version (Coniectanea Biblica. Old Testament 57), Winona Lake 2009.
Pinkuss, H., “Die syrische Übersetzung der Proverbien”, ZAW 14 (1894) 216-217.
Pisano, S., “El texto del Antiguo Testamento”, en H. Simian-Yofre (ed.), Metodología del Antiguo Testamento (Biblioteca de Estudios Bíblicos 106), Salamanca 2001, 42-82.
Rahlfs, A. – Hanhart, R. (eds.), Septuaginta, Stuttgart 91984.
Rodríguez Torné, I., El libro de los Proverbios: tres textos, tres lecturas. El transfondo sociocultural de los escritores, traductores, lectores y comunidades receptoras de TM, LXX, y Vulg. El caso de Proverbios. Disertación. Universidad Complutense de Madrid. Facultad de Filología. Departamento de Estudios Hebreos y Arameos, Madrid 2010.
Sacchi, P., Storia del Secondo Tempio. Israele tra VI secolo a. C. e I secolo d. C., Torino 1994.
Segert, St., “Hebrew Poetic Parallelism as Reflected in the Septuagint”, en N. Fernández Marcos (ed.), La Septuaginta en la Investigación contemporánea. V Congreso de la IOSCS (Textos y Estudios “Cardenal Cisneros” 34), Madrid 1985, 133-148.
Schenker, A., Septante et texte massorétique dans l’histoire la plus ancienne du texte de 1 Rois 2 – 14 (CRB 48), Paris 2000.
–, Älteste textgeschichte de Königsbücher. Die hebräische Vorlage der ursprünglichen Septuaginta asl älteste Textform der Königsbücher (OBO 199), Fribourg – Göttingen 2004.
–, “The Septuagint in the Text History of 1 – 2 Kings”, en A. Lemaire – B. Halpern – M. J. Adams (eds.), The Book of Kings. Sources. Composition, Historiogrphy and Reception, Leiden – Boston 2011, 3-18.
Slings, S. R., Platonis Republicam / recognovit brevique adnotatione critica instruxit (Scriptorium Classicorum Bibliotheca Oxoniensis), Oxonii 2003.
Spottorno Díaz-Caro, M. V., “Libros tercero y cuarto de los Reinos”, en N. Fernández Marcos – M. V. Spottorno Díaz-Caro (eds.), La Biblia Griega Septuaginta. II: Libros Históricos (Biblioteca Estudios Bíblicos 126), Salamanca 2011, 315-428.
Sysling, H., “Translation Techniques in the Ancient Bible Translations. Septuagint and Targum”, en P. A. Noss (ed.), A History of the Bible Translation. I, Roma 2007, 279-305.
Talshir, Z., “1 Kgs and 3 Kgdms – Origin and Revision. Case Study. The Sins of Solomon (1 Kgs 11)”, Textus 21 (2002), 71-105.
–, “The Miscellanies in 2 Reigns 2,35a-o, 46a-I and the Composition of the Books of kings/Reigns”, en M. K. H. Peters (eds.), XIV Congress of the Intenational Organization for Septuagint and Cognate Series, Helsinki, 2010 (Septuagint and Cognate Studies Series 59), Atlanta 2013, 155-174.
Tauberschmidt, G., Secondary Parallelism. A Study of Translation Technique in LXX Proverbs (Academia Biblica 15), Atlanta 2004.
Thackeray, H. St. J., “The Greek Translator of the Four Books of King”, The Journal of Theological Studies VIII/30 (1907), 262-278.
–, A Grammar of the Old in Testament Greek according to the Septuagint. I: Introduction, Orthography and Accidence, Cambridge 1909.
–, Septuagint and Jewish Worship. A Study in Origins, London 21923.
Tov, E., “Three Strange Books of the LXX: 1 Kings, Esther, and Daniel, Compared with Similar Rewritten Composition from Qumran and Elsewhere”, en M. Karrer – W. Kraus (eds.), Die Septuaginta – Texte, Kontexte, Lebenswelten (WUNT 219), Tübingen 2008, 369-393.
–, “3 Kingdoms compared with similar Rewritten Compositions”, en A. Hilhorst – E. Puech – E. J. C. Tigchelaar (eds.), Dead Sea Scrolls and Other Early Jewish Studies in Honour of Florentino García Martínez (Suppl. JSJ 122), Leiden 2007, 345-366.
–, “Editing Proverbs. The Challenge of the Oxford Hebrew Bible”, JNSL 32/1 (2006) 11-28.
–, The Text-Critical Use of the Septuagint in Biblical Research. Second Edition revised and Enlarged, Jerusalem 1997.
–, “Recensional Differences between the Masoretic Text and the Septuagint of Proverbs”, en H. W. Attridge – J. J. Collins – T. H. Tobin (eds.), Of Scribes and Scrolls. Studies on the Hebrew Bible, Intertestamental Judaism, and Christian Origins Presented to John Strugnell on the Occasion of his Sixtieth Birthday, Lanham 1990, 43-56.
–, “The LXX Additions (Miscellanies) in 1 Kings 2 (3 Reigns 2)”, Textus 11 (1984), 89-118.
Tov, E. – Wright, B. G., “Computer-assisted Study of the Criteria for Assessing the literalness of Translation Units in the LXX”, en E. Tov, The Greek and Hebrew Bible. Collected Essays on the Septuagint (Suppl. VT 72), Leiden – Boston 1999, 219-237.
van Keulen, P., Two Versions of the Solomon Narrative. An Inquiry into the Relationship between Mt 1 Kgs 2 – 11 and LXX 3 Reg 2 – 11 (VT. Series 104), Leiden – Boston 2005.
[recibido: 23/02/21 – aceptado: 30/03/21]
1 de Waard, Proverbs (Biblica Hebraica Quinta 17), Stuttgart 2008.
2 No existe todavía una editio crítica del Targum. Hemos consultado la edición de Díez Merino, Targum de Proverbios. Edición Príncipe del Ms. Villa-Amil nº. 5 de Alfonso de Zamora.
3 Holmes – Parsons, Vetus Testamentum Graecum cum variis lectionibus III.
4 Institutum Peshittonianum Leidense, Proverbia – Sapientia Salomonis – Ecclesiastes – Canticum Canticorum II.5.
5 Monachi abbatiae pontificiae sancti Hieronymi in Urbe ordinis sancti Benedicti, Biblia sacra iuxta latinam Vulgatam versionem XI.
6 Hemos consultado también las recensiones de Áquila, Símaco y Teodoción de la edición de Field, F., Origenis Hexaplorum quae supersunt, sive veterum interpretum graecorum fragmenta, post Flaminium Nobilium, Drusium, et Montefalconium, adhibita etiam versione Syro-Hexaplari, concinnavit, emendavit, et multis partibus auxit II.
7 Sobre la tendencia actual en Critica Textus, véase el artículo de Lemmelijn, “L’importance de la Septante”, 15-32, especialmente las páginas 19-23, que llama a la reconsideración de los datos que encontramos en la multiplicidad y pluriformidad de los testimonios textuales bíblicos existentes.
8 Cf. Mancuello, La lección, 48-68.
9 Otra dificultad del libro es la diferencia del orden de las colecciones en la LXX de aquella atestiguada en el TM. Asumimos la propuesta ofrecida por d’Hamonville, Les Proverbes, 30-41, para quien la estructura del libro responde a dos principios: formal y hagiográfico. Alega que la división de la obra es resultado de la composición literaria. Demuestra que Pr de la LXX se encuentra organizado formalmente en cinco secciones identificables según criterios literarios.
10 Fernández Marcos, La Bibbia dei Settanta, 88.
11 Cf. Lemmelijn, “L’importance de la Septante”, 25; Beeckman, “Proverbia de Animalibus”, 257-270.
12 Cf. Olofsson, The LXX Version, 12.
13 Cf. Thackeray, A Grammar of the Old Testament in Greek. I, 13; Baumgartner, Étude critique, 247; Gelerman, Studies in the Septuagint, 12; Barr, “The Typology”, 295; Segert, “Hebrew Poetic Parallelism”, 135; Tov, The Text-Critical Use of the Septuagint, 27; Cook, The Septuagint of Proverbs, 29; d’Hamonville, Les Proverbes, 19-20; Moro, Il testo Greco di Proverbi, 392-393; Eadem, “Proverbi”, 459; Sysling, “Translation Techniques”, 284; Cañas Reíllo,“El libro de los Proverbios”, 276.
14 Cf. Barr, “The Typology”, 303. Existen otras posibilidades, por ejemplo, Fox, en su edición ecléctica del libro de los Proverbios discute la nomenclatura técnica de traducción libre y literal retomando su artículo “LXX-Proverbs as a Text-Critical Resource”, Textus 22 (2005) 95-128 para reafirmar su preferencia de hablar de traducción mimética y flexible. Cf. íd., Proverbs, 38-40.
15 “Nous sommes ici en présence d’un style libre, facile, rendant la pensée plus volontiers que le mot même, d’un traducteur faisant œuvre de littérateur plus encore que d’interprète rigoureusement fidèle”. Baumgartner, Étude critique, 11.
16 Cf. Barr, “The Typology”, 281-294.
17 Cf. Olofsson, The LXX Version, 13-26; íd., Translation Technique, 105-133.
18 Cf. Barr, “The Typology”, 279-235.
19 Cf. Tov, The Text-Critical Use of the Septuagint, 57-71.
20 Cf. Cook, “Aspects”, 143-144; íd., The Septuagint of Proverbs, 30.
21 Cf. Moro, “Proverbi”, 459.
22 Cf. Tov, The Text-Critical Use of the Septuagint, 26; Taubschmidt, Secondary Parallelism, 224; Bons, “La traducción griega en la actualidad”, 24;
23 Cf. Cook, “The dating”, 386. Un modo de acercamiento reciente se aplica bajo el nombre de “content- and context-related approach” desarrollado en Lovaina por los profesores Lemmelijn – Ausloos, “Septuagint Studies in Louvain”, 145-158.
24 Cf. Mancuello, La lección, 246-255.
25 Una hipótesis sobre la historia textual de la versión griega de los Proverbios puede leerse en Moro, “Ascolta la mia parola”, ix-xii.
26 El autor que ha dedicado mayor atención a este fenómeno en Proverbios LXX es J. Cook. Nuestro estudio se inspira en sus numerosos artículos, muchos de los cuales recogidos en Cook, J., The Septuagint of Proverbs Jewish and/or Hellenistic Proverbs? Concerning the Hellenistic Colouring of LXX Proverbs (Suppl. VT 69) Leiden – New York – Köln 1997. Discrepamos, en cambio, con su propuesta sobre el lugar de traducción de Pr LXX: en Palestina. Cf. íd., “Semantic Considerations”, 67-87. Recientemente retomó su postura para reafirmarla y alega que la LXX es una traducción de una traducción (OG). Cf. íd., “Contextuality and the Septuagint”, HTS Teologiese Studies/Theological Studies 75/3 (2019) a5029, 1-7.
27 Una monografía reciente ha acercado nuevamente el libro de los Proverbios a 1 Re 1–11 y esta vez, desde la intertextualidad. El autor aclara su propósito y se deslinda, como corresponde a su mirada, de un interés de carácter diacrónico, cual es nuestro cometido. Cf. Kynes, “Wisdom Defined through Narrative”, 37. No hay todavía, según Milán, “Biblia e intertextualidad”, 359-367, hoy un consenso sobre lo que se entiende exactamente por intertextualidad introducida en la crítica literaria en general ni en aquella aplicada en el campo bíblico donde se le llama exégesis intrabíblica, relectura, alusión intrabíblica.
28 La oración de Salomón se considera una piedra angular para revelar algunas de las ideas principales del libro. Cf. Avioz, “The Book of the Kings”, 19.
29 Cf. Aitken, “Poet and Critic”, 196; Rodríguez Torné, El libro de los Proverbios, 128.
30 Cf. Cignelli – Pierri, Sintassi di Greco Biblico, §12,2.
31 Cf. Conybeare – Stock, Grammar of Septuagint, §50a, §54; Cimosa, Guida allo studio, 110.
32 Cf. Cimosa, Guida allo studio della Bibbia Greca, 102.
33 Cf. Conybeare – Stock, Grammar of Septuagint, §90g. En el aparato critico de la BHS es citado el Pentateuco Samaritano ῾al-dәbar porque en el TM la vocalización es dudosa ‘el-dәbar.
34 Cf. Barr, “The Typology”, 294-303; Olofsson, The LXX Version, 13-15; Sysling, “Translation Techniques”, 285; Tov, The Text-Critical Use of the Septuagint, 57-71.
35 Las demás recensiones y traducciones antiguas, en cambio, han transliterado el término. como nombre propio lәmû’ēl y nomens regens de dibrê. Una amplia discusión sobre las variantes del v. 1 véase en Mancuello, La lección, 49-52.
36 Cf. Jäger, Observationes in Proverbiorum, 222; Baumgartner, Étude critique, 242; Mezzacasa, Il libro dei Proverbi, 180.
37 Cf. Fox, Proverbs 10–31, 1064; Cook, “Unit Delimitation”, 60.
38 Cf. Cook, The Septuagint of Proverbs, 298; d’Hamonville, Les Proverbes, 307.
39 Cf. Mancuello, La lección, 93.
40 Semejante vestigio se encuentra también en la colección de 24,23-34 empalmada con 30,15–33. En 24,23a dice: “Estas cosas os digo a vosotros los sabios para que penséis” taûta dè légō hymîn toîs sofoîs epiginṓskein; cuyos elementos constitutivos no son imposibles de identificar en el TM: gam-’ēllem laḥăkāmîm.
41 Cf. De Waard, “The Septuagint of Proverbs”, 305-309; Cañas Reíllo, “Libro de los Proverbios”, 278.
42 Cf. Baumgartner, Étude critique, 9-11, 249; Mezzacasa, Il libro dei Proverbi di Salomone, 36; Gerleman, Studies in the Septuagint, III, 28-35; D’Hamonville, Les Proverbes, 24-25; Cañas Reíllo, “El libro de los Proverbios”, 277-279.
43 Nuestra postura sobre las propuestas de enmiendas del v. 2 véase en Mancuello, La lección, 53-54.
44 Cf. Barr, “The Typology”, 300; Sysling, “Translation Techniques”, 285-286.
45 Una extensa discusión sobre las variantes del v. 3 y las propuestas de enmiendas, véase Mancuello, La lección, 54-58
46 Clarificar las expresiones ambiguas es una de las tendencias del traductor griego del libro de los Proverbios (cf. 15,33; 16,7; etc). Cf. De Waard, “The Septuagint of Proverbs”, 309-310.
47 Rodríguez Torné, El libro de los Proverbios, 132.
48 Cf. Mezzacasa, Il libro dei Proverbi, 36-37; Gerleman, Studies in the Septuagint. III, 28-35; d’Hamonville, Les Proverbes, 102-112;
49 Cf. Himbaza – Schenker, “Du texte à la theologie”, 136.
50 Cf. Baumgartner, Étude critique, 247-265; Gerleman, Studies in the Septuagint. III, 14-35; Barucq, Le livre des Proverbes, 38-39; Cook, The Septuagint of Proverbs, 334; d’Hamonville, Les Proverbes, 102-103.
51 Cook, Proverbs, 305; d’Hamonville, Les Proverbes, 28, 33-34; Cook, “Unit Delimitation”, 60; Fox, Proverbs 10-31, 1064.
52 Cook, “Theological/Ideological Tendenz”, 71-76, ha investigado el tema pero no aborda de modo sistemático el caso de nuestra colección.
53 Cf. Mancuello, La lección, 147-154.
54 Recuérdese que la oración de Salomón es conservada en tres libros diferentes en la Septuaginta: 2 Paralipómenos = 2 Cro 1,1-12 y Sb 9. El triple testimonio sobre el tema podría indicar el aprecio del que gozaba en la religión judía. Un estudio pormenorizado sobre la materia, véase Gilbert, “La structure de la prière”, 167-201.
55 Himbaza – Schenker, “Du texte à la théologie”, 134-135.
56 Sobre la compleja historia de los textos de los libros 1-2 Reyes en su versión griega véase los sendos trabajos Schenker, Septante et texte massorétique dans l’histoire la plus ancienne du texte de 1 Rois 2 – 14 (CRB 48), Paris 2000; Älteste textgeschichte de Königsbücher. Die hebräische Vorlage der ursprünglichen Septuaginta asl älteste Textform der Königsbücher (OBO 199), Fribourg – Göttingen 2004; “The Septuagint in the Text History of 1 – 2 Kings”, en Lemaire – Halpern – Adams (eds.), The Book of Kings. Sources. Composition, Historiography and Reception, Leiden – Boston 2011, 3-18.
57 Cf. Thackeray, “The Greek Translators”, 276-277 con la salvedad que el traductor fuese de Palestina; Harl – Dorival – Munnich, La Bible grecque des Septante, 98; De Vries, 1Kings, liv-lv; Spottorno Díaz-Caro, “Libros tercero y cuarto de los Reinos”, 315; Baretta, “Regni”, 256; Schenker, Älteste Textgeschichte der Königsbücher, 9; íd., “The Septuagint in the Text History of 1-2 Kings”, 4, 16-17.
58 “Les études de ces dernières années ont porté sur les différences textuelles en les replaçant dans leur contexte historique. Il s’agissait d’établir l’antériorité d’un texte par rapport à l’autre. Cet aspect a été bien mis en relief. Il sera intéressant à présent pour la recherche d’interpréter théologiquement ces formes textuelles. Pour ce faire, il faudra un patient travail d’interprétation de très nombreuses et souvent minutieuses différences textuelles tout au long du texte biblique. Ces interprétations permettront de mieux comprendre l’évolution et la cohabitation de théologies bibliques différentes à une époque de l’histoire de la Bible, en les intégrant dans l’histoire de l’humanité”. Himbaza – Schenker, “Du texte à la theologie”, 139.
59 Cf. Gerleman, Studies in the Septuagint, III, 144; Moro, “Ascolta la mia parola”, xiii; Eadem, “Proverbi”, 458; Clifford, “Observations on the Text”, 52-54; Jüngling – von Lips – Scolarick, “Paroimiai”, 1950; Cañas Reíllo, “El libro de los Proverbios”, 273; Jüngling, “Paroimiai”, 379-389; Fox, Proverbs, 36.
60 Cf. Thackeray, A Grammar of the Old Testament in Greek, 16.
61 La relación entre los textos de los libros de los Reyes TM y la LXX es objeto de estudio constante Muchos propugnan como texto referente de 3 Re un texto hebreo diferente del TM pero falta todavía consenso entre los estudiosos. Cf. Tov, “3 Kingdom Compared”, 345-366.
62 En su forma y contexto actuales las misceláneas son consideradas como resultado de una intervención redaccional posterior. Y a propósito del nombre, se emplean los tres epitetos. Cf. Tov, “The LXX Additions (miscellanies) in 1 King 2”, 89-118; “Three Strange Books of the LXX”, 371-379; Talshir, “The Miscellanies in 2 Reigns 2,35a-o, 46a-I”, 155-174; Joosten, “Textual Plurality”, 293-307; Darsham, “The Hapax”, 120-127.
63 Tov, “3 Kingdoms Compared”, 353, n. 51: “The location of these summaries is inappropriate since Solomon is not yet a central person in this chapter”; detalle que lo vuelve más llamativo por el tema que recoge.
64 El relato de 3 Re 3,16-28 termina afirmando sobre Salomón: “... porque vieron que había en él la inteligencia (frónēsis) de Dios para administrar justicia”. Y en 3 Re 3,12 cuando el Señor le responde, le dice: “he aquí que yo haré conforme a tus palabras: he aquí que te daré un corazón sensato (kardían fronímen) y sabio (sofén), hasta tal punto que no ha habido antes otro como tú, ni después de ti se levantará otro como tú”. Parece que se evocan mutuamente. Talshir, “The Miscellanies in 2Reigns 2,35a-o, 46a-I”, 160, en cambio, repara la ausencia del tema de la revelación de Gabaón y la administración de la justicia de 3 Re 3,4-28 en la miscelánea de 3 Re 2,35a-l y v. 461-0.
65 “The summaries were intended to stress the God-given (v. 35a) wisdom of Solomon, just 1 – 2 Chronicles and 11QPsa XXVII stress David’s wisdom”. Tov, “Kingdoms Compared”, 357.
66 “Dans la version grecque, désignent encore comme étant Salomon, richesse, intelligence (v. 3), sagesse (v. 5), excellence du jugement (v. 8-9)”. d’Hamonville, Les Proverbes, 307.
67 Cf. Jüngling, “Paroimiai”, 380-381.
68 Cf. Jüngling, “Paroimiai”, 386.
69 Que la sabiduría procede del Señor es una idea contenida en el libro de los Proverbios TM (cf. Pr 2,6; 21,30; etc.).
70 Cf. Mancuello, La lección, 53.
71 Ib., 53.
72 No hay que olvidar que Proverbios LXX es una obra poética y el libro de 3 Re es una obra narrativa; y, como tal, el texto de Pr 31,1-9LXX está sujeto a esquemas métricos y estilísticos propios de la poesía griega clásica y helenística (cf. Cañas Reíllo, “Libro de los Proverbios”, 277), elementos que obligan a una selección del léxico. Por eso, pretender encontrar una correspondencia exacta en el vocabulario de los textos para sugerir la relación entre Pr 31,1-9LXX y 3 Re 3 es una empresa fallida.
73 El libro de las Crónicas, en su forma TM presenta una deliberada idealización de la figura de Salomón; es acercado a Moisés y a los patriarcas, ocupa en las Crónicas el lugar que David ocupa en los libros de los Reyes. Lo demuestra de modo magistral Cabello Leiva, El rey Salomón, 165-220; sobre todo en los textos de 2 Cro 7,8-11 en relación 1 Re 8,65–9,1 y en 2 Cro 7,11-22 en comparación a 1 Re 9.2-9. Por ejemplo, en 2 Cr 7,12-22 es la respuesta de Yhwh a la oración de Salomón y en dicho pasaje se distinguen claramente la parte en la que Yhwh se dirige a Salomón (vv. 12-18) de la sección en la que Dios habla al pueblo (vv. 19-22). Es sumamente interesante que el autor demuestre que “El Salomón de Crónicas se asemeja a la figura de Moisés en cuanto intercesor del pueblo que encuentra una respuesta claramente positiva de parte de Yhwh. En Crónicas, Dios responde a Salomón de un modo único, directo e intenso. Si bien en Reyes la dimensión intercesora de Salomón está presente, la explícita contestación de Yhwh, sin embargo, no lo está y esto lo diferencia notablemente del Salomón de Crónicas, el cual sí es presentado como un intercesor a quien Dios concede lo que le es pedido. En 1 Re la petición de perdón de Salomón (slḥ) se repite 5x (1 Re 8,30.34.36.39.50) y no obtiene una respuesta de Yhwh, en contraste, en Cro slḥ es empleada en la oración de Salomón 5x (2 Cro 6,21.25.27.30.39) y la séptima es la respuesta positiva de Yhwh (2 Cro 7,14)”. Ib., 169.
74 Tomamos la traducción castellana de Spottorno Díaz-Caro, “Libros tercero y cuarto de los Reinos”, 332. Un elemento particular e iluminador constituye el dato textual de que el libro según el ms antioqueno comienza con el rey Salomón y su figura no está dentro del esquema empleado para los demás reyes. Para una visión de conjunto sobre la figura de Salomón en 3 Re en comparación con 1 Re, véase Schenker, Septante et texte massorétique, 151-152, donde el autor demuestra la intencionada corrección de la imagen de rey siempre más pacífico, irreprensible y soberano imperialmente. Este fenómeno, según el autor, puede ser ubicado histórica entre los años 250 y 130 a. C. Ib., 147; cf. Bogaret, “La Septante et 1 Rois 2-1 4”, 213.
75 Es una de la expresiones de Pr 31,1-9TM más difíciles de traducir. En nuestra tesis hemos estudiado y discutido ampliamente las propuestas de enmienda del texto. Allí y también ahora sugerimos que el TM conserva la lección más antigua y hemos concedido la razón a Abraham Ibn Ezra a propósito de la identificación de la forma gramatical de lamḥôt y su raíz mḥh bajo el significado de “borrar, eliminar, destruir”. Cf. Mancuello, La lección, 54-58.
76 Cf. de Lagarde, Anmerkungen, 91; Baumgartner, Étude critique, 243.
77 Cf. Cook, The Septuagint of Proverbs, 299; íd., “Aspects”, 148.
78 Cf. Talshir, Z., “1 Kgs and 3 Kgdms”, 71-105. En relación a 3 Re 11,1-8, Van Keulen, Two Version, 203-221, demuestra que 1 Re 11,1-8 conserva una lectio más antigua que 3 Re 11,1-8 o bien este es una versión re-organizada de 1 Re 11,1-9.
79 Cf. Mezzacasa, Il libro dei Proverbi, 180 n. 72.
80 Los tipos de subrayados que siguen pretenden evidenciar las coincidencias.
81 Cf. Olofsson, Translation Technique, 21, piensa que los traductores de la LXX conocían mejor el arameo que el hebreo
82 Los proverbios que hablan sobre el rey en singular: Pr 1,1; 14,28; 16,10.14.15; 19,12; 20,2.26.28; 21,1.11; 25,1.5.6; 29,4.14; 30,27.(28).
83 Un comentario exegético al v. 3 TM, véase en Mancuello, La lección, 99-101.
84 Cf. de Lagarde, Anmerkungen zur griechischen, 9.
85 Cf. Cuppi, “The Treatment of Personal Names”, n. 67.
86 Cook, The Septuagint of Proverbs, 334; Gerleman, Studies in the Septuagint III, 33.
87 Cf. Jäger, Observationes in Proverbiorum, 224.
88 La metátesis tradicionalmente es considerado como error escribal. Cf. Kaminka, “Septuaginta”, 69. Es posible, sin embargo, que sea una técnica de traducción. Cf. de Waard, “Some Unusual Translation”, 185-193.
89 Cf. Mancuello, La lección, 65-66.
90 Cf. d’Hamonville, Les Proverbes, 309.
91 Cook, The Septuagint of Proverbs, 299, alega que el traductor lo ha prestado de la literatura extrabíblica.
92 A propósito del verbo, Lavoie hace notar que la S lo atestigua en pasivo y por tanto no es una exhortación sino una constatación que hace pensar a una praxis que tiene eco en Jr 16,7 y en algunos tratados rabínicos. Cf. Lavoie, “Vin et bière”, 37.
93 Cf. Baumgartner, Étude critique, 244; Pinkuss, “Die syrische Uebersetzung”, 217; BHQ 17, 56*.
94 Illa est genuina lectio, quae ceterarum originem explicat. Pisano, “El texto”, 74. Sin embargo, Fox, Proverbs, 391 asevera: “G is the source for them all”.
95 También Tauberschmidt, Secondary Parallelism, 38, llega a una conclusión parecida tras su análisis: “this section gives evidence of the translator’s effort to produce word and phrase pairs that are more closely synonymous”.
96 Cf. d’Hamonville, Les Proverbes, 102.
97 Una crítica textual pormenorizada del verso del TM, véase en Mancuello, La lección, 65-68.
98 Cf. Baumgartner, Étude critique, 244; Pinkuss, “Die syrische Übersetzung”, 217; Mezzacasa, Il libro dei Proverbi, 180; Fox, Proverbs 10 – 31, 1065.
99 Fox, Proverbs, 392, discutiendo la propuesta de de Waard (BHQ 17) alega: “It is unlikely that G, S and T have Aramic lml’ ‘to the word’ (BHQ). The expected form is lmlt’”.
100 Fox, “How the Peshitta uses Septuagint”, 37-56. Otra postura véase en Cook, “Are the Syriac and Greek Versions of the ishah zarah (Prov 1 to 9) Identical?” 117-132.
101 Cf. Mancuello, La lección, 148-151.
102 Cf. Taubschmidt, Secondary Parallelism, 127.
103 Abundan las propuestas de enmienda del texto para la expresión bәnê ḥălôp. Una discusión amplia véase en Mancuello, La lección, 66-68.
104 Cf. Cook, “Aspects”, 148; íd., The Septuagint of Proverbs, 340; d’Hamonville, Les Proverbes, 309.
105 Plato, Respublica. III, 409a (ed. Slings, 119).
106 Cf. Mancuello, La lección, 141-143.
107 Cf. Cook, The Septuagint of Proverbs, 304.
108 Mancuello, La lección, 85.
109 Sobre la procedencia del canon griego véase Joosten, “The Origin of the Septuagint Canon”, 688-699.
110 Se trata de una oración por el rey adjudicada a Salomón cuya datación se ubica, según Atkinson, por alusiones a Herodes el Grande, entre los años 37 a. C. y el 4 a. C. Cf. Atkinson, “On the Herodian Origin”, 435-460.
111 QoLXX 1,1 dice: “Palabras de Eclesiastés, hijo de David, rey de Israel en Jerusalén” mientras que el TM dice únicamente: “Palabra del Qohélet, hijo de David, rey en Jerusalén”.